El Sindicato Único del Personal de Aduanas de la República Argentina (SUPARA) realizó un congreso nacional de delegados y facultó a la conducción del gremio a llevar a cabo las medidas necesarias para encauzar el conflicto en el organismo, luego de la amenaza de más de 3.000 despidos por parte del gobierno nacional.

El Sindicato Único del Personal de Aduanas de la República Argentina (SUPARA) realizó ese viernes un plenario nacional de delegados dónde resolvió mantener el estado de alerta permanente en el sector y facultar a la conducción del gremio “a llevar a cabo todas las medidas, acciones directas y judiciales necesarias, ante el eventual avance del conflicto” que atraviesa el sector con el gobierno nacional.

La organización que conduce Carlos Sueiro, emitió un documento donde reclama al gobierno nacional “un llamado a la sensatez, la responsabilidad y el diálogo”, en el marco del conflicto desatado tras la decisión del Ejecutivo de “flexibilizar y agilizar el comercio exterior”, indicó SUPARA.

El gremio remarcó que la decisión del gobierno de Javier  Milei, “amenaza con desestabilizar los controles que históricamente ha ejercido el servicio aduanero, generando en consecuencia un clima de preocupación para esta organización gremial y los trabajadores”, subraya el texto.

En esa línea, SUPARA explicó que “la reciente disolución de la AFIP, pre anunciada por el vocero de prensa del gobierno, y posteriormente concretada el lunes pasado, fue una nueva decisión que generó un clima de incertidumbre y significó un preocupante avance sobre el funcionamiento del organismo y la estabilidad laboral de los trabajadores/as”, sostiene el sindicato.

La entidad cruzó al gobierno por “la concreta amenaza de desvincular a 3.115 compañeros que ingresaron durante la administración anterior”, y resaltó que la misma, “fue percibida no solo como un acto de persecución política, sino también como una medida que pulveriza la estabilidad laboral, los derechos consagrados en nuestro convenio colectivo de trabajo y la integridad de los trabajadores, comprometiendo seriamente el sostenimiento de sus familias”, afirmó la organización.

Asimismo, manifestó que “a pesar de los constantes llamados al diálogo por parte de las organizaciones gremiales y de la voluntad encontrar soluciones pacíficas, nos hemos enfrentado al más absoluto silencio de las máximas autoridades”, insistió la entidad.

Por otra parte, SUPARA ponderó que “la unidad de los trabajadores/as y la fortaleza de las medidas de acción directa llevadas a cabo en forma escalonada, no han pasado desapercibidas. Por el contrario, todos los esfuerzos realizados hasta el momento han logrado captar la atención no solo de las autoridades del organismo, sino también del Gobierno Nacional, que ante las acciones ejercidas ha arbitrado los mecanismos que permitan posibilitar un espacio de diálogo”, enfatiza el documento.

Con este marco, el gremio consideró que la intervención de la Secretaría de Trabajo de la Nación, en el marco del conflicto, a través de la imposición de una conciliación obligatoria ante la convocatoria a un paro el pasado 30 de octubre, “se presenta como una oportunidad hacia el abordaje de este conflicto”, reconoció la organización.

FUENTE: MUNDO GREMIAL

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